LOS DATOS DEL DÍA
jueves, 31 de octubre de 2024
La sal de la Tierra
Elogio de las personas buenas que viven entre nosotros. Con motivo de la festividad de Todos los Santos, reconocer el papel que juegan todas estas personas en nuestro entorno
INTRODUCCIÓN PARA EL EDUCADOR

Todos conocemos personas admirables que viven a nuestro lado.

Para muchos de nosotros nuestra abuela es una persona extraordinaria, nuestros padres merecen un monumento, algunos de nuestros vecinos serían merecedores de una medalla.

Pagola en este escrito trata de resaltar algunas actitudes y comportamientos de gente sencilla, que a base de sensillez han conseguido una existencia fuera de lo común, digna de ser imitada.

Son los santos de hoy en día

ANIMADOR DE LA ORACIÓN TODOS
ACORDÉMONOS DE QUE ESTAMOS EN LA SANTA PRESENCIA DE DIOS ADORÉMOSLE

No hablan mucho. No se hacen notar. Su presencia es modesta y callada, pero son "la sal de la tierra". Mientras haya en el mundo mujeres y hombres atentos al Espíritu y abiertos a Dios, será posible seguir esperando. Ellos son el mejor regalo para una Iglesia amenazada por la mediocridad espiritual.

 

            Su influencia no proviene de lo que hacen ni de lo que hablan o escriben, sino de una realidad más honda. Se encuentran retirados en los monasterios o escondidos en medio de la gente. No destacan por su actividad y, sin embargo, irradian energía interior allí donde están.

 

            No viven de las apariencias. Su vida nace de lo más hondo de su ser. Viven en armonía consigo mismos, atentos a hacer coincidir su existencia con la llamada del Espíritu que los habita. Sin que ellos mismos se den cuanta, son sobre la tierra reflejo del Misterio de Dios.

 

            Tienen defectos y limitaciones. No están inmunizados contra el pecado. Pero no se dejan absorber por los problemas y conflictos de la vida. Vuelven una y otra vez al fondo de su ser. Se esfuerzan por vivir en presencia de Dios. Él es el centro y la fuente que unifica sus deseos, palabras y decisiones.

 

            Basta ponerse en contacto con ellos para tomar conciencia de la dispersión y agitación que hay dentro de nosotros. Junto a ellos es fácil percibir la falta de unidad interior, el vacío y la superficialidad de nuestras vidas. Ellos nos hacen intuir dimensiones que desconocemos.

 

            Estos hombres y mujeres abiertos al Espíritu son fuente de luz y de vida. Su influencia es oculta y misteriosa. Establecen con todos una relación que nace de Dios. Viven en comunión con personas a las que jamás han visto. Aman con ternura y compasión a gentes que no conocen. Dios les hace vivir en unión profunda con la creación entera.

 

            En medio de una sociedad materialista y superficial que tanto descalifica y maltrata los valores del espíritu, yo quiero, en esta fiesta de Pentecostés, hacer memoria y elogio de estas personas "espirituales". Ellas nos recuerdan el anhelo más grande del corazón humano y la Fuente última donde se apaga toda sed.

PREGUNTAS PARA EL DIÁLOGO

¿Qué es lo que más aprecias en las personas?

¿A qué persona o personas quieres de manera especial? ¿Qué tienen de particular para que las quieras tanto?

¿Qué rasgos envidias en las personas a las que admiras?

¿Qué cualidades, además de las muchas que tienes, te gustaría poseer?

ORACIÓN

Buenos días, Señor

¡Qué a gusto me encuentro entre la gente que es sencilla!

¡Cómo disfruto de su compañía sin tener que fingir lo que no soy!

 

Hay personas con las que conecto enseguida

porque no se dan importancia.

porque no van alardeando de lo que tienen ni tampoco de lo que son

Con estas personas me siento bien.

 

Quiero, Señor, ser de ese tipo de personas,

que se relacionan desde la sencillez,

que tratan a los demás de igual a igual,

que se hacen querer porque nunca van con segundas intenciones.

 

Me pongo en tus manos, Señor

ANIMADOR DE LA ORACIÓN TODOS
SAN JUAN BAUTISTA DE LA SALLE RUEGA POR NOSOTROS
VIVA JESÚS EN NUESTROS CORAZONES ¡POR SIEMPRE!