LOS DATOS DEL DÍA
martes, 3 de diciembre de 2024
UN CAMINO A SEGUIR...
ANIMADOR DE LA ORACIÓN TODOS
ACORDÉMONOS DE QUE ESTAMOS EN LA SANTA PRESENCIA DE DIOS ADORÉMOSLE

¿Recordáis qué fue lo último que vimos de la vida de Juan Bautista?

Pues bien, los días de Juan Bautista de La Salle llegaron a su fin, y a su muerte, en 1719, dejó la herencia de un centenar de Hermanos repartidos en 22 escuelas y, lo que es más importante, NOS DEJÓ UN CAMINO A SEGUIR.
La labor de los Hermanos sigue siendo de gran necesidad en nuestros días; hoy se extiende por casi 90 países, con 6000 Hermanos que, compartiendo todo con los profesores, intentan educar a más de 1 millón de niños como vosotros en todo el mundo, siguiendo el mensaje que nos dejó Juan Bautista de La Salle.
Todo esto nos hace pensar, que San Juan Bautista de la Salle TOMÓ MUY EN SERIO

AL HOMBRE, a la juventud, a la escuela, como medio de educar humana y cristianamente. Quiso fraguar en las sillas de las escuelas una HERMANDAD, esa escuela en que el maestro fuera HERMANO.

En la escuela de la Salle no caben discriminaciones basadas en la diferencia de dinero, de inteligencia, de creencias o de razas...

Los educadores, como La Salle, intentamos formar personas que sepan arriesgar su vida a favor de un mundo más humano y cristiano.

Nuestras escuelas siguen siendo hoy sementara de gente buena y de santos.

PREGUNTAS PARA EL DIÁLOGO

¿Sabrías expresar las ideas más importantes de lo que hemos leído?
¿Por qué La Salle es una gran familia?

ORACIÓN

Amigo Juan Bautista, nos has regalado algo muy hermoso: nuestro Colegio y una educación.

El Colegio junto a nuestros padres, nos ayudan a seguir creciendo; nos ayudan a aprender que en la vida, tenemos que ser personas responsables, ilusionadas y con ganas de hacer grandes cosas.

Gracias Juan Bautista, porque sabes estar junto a nosotros y presentarnos a nuestro amigo Jesús, el culpable de todo lo que está en marcha.

GRACIAS JUAN BAUTISTA.

ANIMADOR DE LA ORACIÓN TODOS
SAN JUAN BAUTISTA DE LA SALLE RUEGA POR NOSOTROS
VIVA JESÚS EN NUESTROS CORAZONES ¡POR SIEMPRE!